bienvenidos

Diario + Recuerdos = Mis Crisis Nerviosas

Para poder entender este blog, tienen que leer todo desde el principio. Se trata de una historia correlativa, la cual no van a entender si empizan desde la última entrada.
Las entradas que se titulan "Diario", siguen una línea aparte. Son opcionales a la biografía.
Espero que lo disfruten


DEDICADO A MI MEJOR AMIGA EN EL MUNDO MUNDIAL. Y A MI AMIGA LA DESAPARECIDA.

miércoles, 19 de enero de 2011

ESTOY TAN FURIOSA QUE VOY A ROMPER ALGO


Malditos pañoluchos de mierda, qué carajo están haciendo que me roban nota, eh?
Me tienen repodrida, van a ver la que les espera, reverendos hijos de mil puta, que asco les tengo!!!!
Esas preguntas ambiguas me dan repugnancia, por qué no se dedican mejor a enseñar a leer y a escribir, que de eso sus hijos no deben tener ni puta idea.
LA PUTA MADRE QUE LOS REMIL PARIÓ A TODOS.

Gracias por escucharme. Buena suerte en la próxima.

martes, 20 de julio de 2010

Diario: Felicidad (Segunda parte del día)


20 de julio (Día del Amigo)
Cambiando de tema, ayer fui a visitar a Noelia, mi querida amiga. Qué gusto volver a verla… Anoche le escribí una especie de carta de agradecimiento, y terminé llorando como una pelotuda. Todavía no pudimos hablar de si la leyó o no…
Se va a casar… buaaaa tuve que contener la emoción. Todavía no hay fecha, pero estoy tan emocionada como ella, creo. Como le dije en la carta, cuando se case, será como ver reflejada una parte de muy especial mi vida que ha llegado a su meta. Nada me haría más feliz.
Estoy tan contenta por ella, que ninguna otra mierda de mi casa podría cagarme en este momento. Y lo mejor de todo, es me compré unas zapatillas botitas de esas medio punkers que me encantan, así que estoy rebosando felicidad.
Felicidad y agotamiento.

Diario: Agotamiento (Primera parte del día)


19 de julio

Después de que el viernes me enterara de que al parecer tiene novia (una chica lo llamó en medio de la clase y después lo esperaba a la salida), llegué a la conclusión de que no es que me evita, pero se le acabó la onda, o algo.
Lo que sí evita, es mi mirada. Las pocas veces que se atreve a mirarme a los ojos, los desvía rápidamente. Qué puede significar, no lo sé.
Casi no tiene temas de conversación. A veces parece que se esfuerza por sacarme algún tema, pero es como que se traba. Incluso hoy, que me esperó para irnos juntos, caminamos prácticamente todo el camino en silencio. Después yo rompí el hielo, porque me sentía demasiado estúpida, incómoda.
Sinceramente, ya me está empezando a preocupar bien poco. Porque, repito, seguramente ya se dio cuenta de lo insulsa, amargada y poco atractiva que soy. Y eso por no mencionar a su supuesta novia. Qué cruel es la vida.

miércoles, 14 de julio de 2010

Diario: 2º entrada del día - Tocando fondo


Ojalá algún día pueda contar todo. Me dan ganas de contárselo al mundo entero; que el mismo mundo tome las represalias pertinentes, pero no tengo los huevos necesarios. Simplemente no puedo.
Cuando lo intenté a los 17 años, fueron las hormonas las que me llevaron hasta ahí. No, ahora que me doy cuenta, no fue eso. Sino que fueron todos los días de mi puta vida que me empezaron a pesar.
Y ahora miro hacia atrás y digo, qué bonito, 17 años. Hasta lo extraño; extraño ese infierno, esa Libertad que tenía dentro del abismo. Porque ahora, a tan solo dos meses de cumplir los 21, siento que cada maldito día que pasa, se me escurre la vida, se me escapa de las manos.
En este momento, acabo de salir de llorar del baño, un sitio bastante tranquilo, pero nunca del todo seguro. Estoy completamente harta. Me encantaría que alguien pudiera escucharme. Pero no tengo a nadie.
Me encantaría que la tonta de Débora no se hubiera dejado llevar por las habladurías cuando le empecé a confesar todo, muy de apoco para no asustarla. Al final la asusté. Y quién no lo haría, estoy pensando ahora, con lágrimas en los ojos.
Hace un año exactamente, tuve intenciones de quitarme la vida. Sí, fue en julio del año pasado. ¿Qué ha cambiado desde entonces? Nada. No, me equivoco. Está todo peor, porque se me fue otro año de mi vida al pedo, sin haber podido hacer nada al respecto.
Después de escribir esto, ¿qué voy a seguir haciendo? Lo que hago todos los días: fingir que nada pasa. Que llevo una vida normal. Que vivo bien, que estoy satisfecha, que estoy alegre. Que salgo a la calle y no me siento sola. Que no me siento intimidada, maltratada, encerrada, ni nada.
Simplemente, que soy una chica que prefiere seguir viviendo su mundo imaginario que su realidad. Así de sencillo. Y ya no puedo seguir escribiendo, porque voy a mojar el teclado.

Diario: El vacío de un estómago


Y no por hambre. No. Hoy no dio señales de vida. Así de simple. Y eso que me había arreglado… hasta me había dejado suelto el pelo. Tanto para nada.
Para colmo me encontré con una “supuesta amiga” del instituto, y la muy boluda me miró de lejos y después se hizo la distraída y no me saludó. Eso me terminó de cagar el día.
Por suerte me encontré al Hombre Feliz, que por lo menos me alegró la mañana, ya que tuve una discusión con mi viejo (hoy también).
Ahora sí que sí, voy a tratar de que no me influencie. No quiero terminar como la última vez. Se acabó, en serio. Seguro que no me saldrá como yo espero pero aun así, lo intentaré.

martes, 13 de julio de 2010

Diario. ¿La decepción en toda su extensión?


(Nota: no lo pude postear ayer porque no tenía red)
Sí, sí. Leyeron bien el título. Aunque está en signos de pregunta, porque le doy el beneficio de la duda.
¿Qué pasó? Fui corriendo a la mañana, tenía clase a las 10, llegué ahí corriendo para estar 10 minutos antes (no sé ni para qué, pero bueno). Me sorprendí a mí misma un pelín nerviosa. Tan nerviosa como cuando… tuve mi última cita con Campos (sí, ahora puedo nombrarlo, ya no es más el innombrable). Lo que importa es que, llegué ahí, y no estaba. Esperé y esperé, pero no fue.
Todavía no entiendo por qué estuve tan decepcionada. Sentí así como un vacío. ¿Tanto quería verlo? ¿Soy tan estúpida? No, es que estoy muy sola. Otra explicación no se me ocurre.
Volví arrastrando los pies a casa. Después cuando llegó la hora de la clase de la tarde, me lo tomé con calma. O sea, esperaba verlo, pero ya iba preparada. En el camino, me puse los auriculares escuchando bien fuerte “Slept so long” (Dios, qué temazo). Y sobre todo recalcando la parte del “… and fuck it up…!!”.
Me dije, “no tenés que ilusionarte tanto. Es sólo un chico. Un chico cualquiera. Puedo seguir viviendo sin él. Además, no lo conozco de nada. Dejá de ser una Himono-onna*” etc etc.
Llegué, y no había nadie (sólo la argentina-pesada). Subí, sin importarme nada, y me puse a hacer unos tests. La gente seguía llegando, pero él no. Hasta que llegó.
Ay por Dios.
Se quedó parado mirándome un segundo, muy sutilmente y disimulando, pero estoy segura de haberlo visto, no me lo imaginé. Se acercó a mí (sonriendo), me saludó y me hizo un gesto para que sacara mi bolso de la silla de al lado para él poder sentarse.
Respirar, respirar.
Lo primero que me dijo fue (palabras textuales) “creí que estabas desaparecida”.
Ay, la P.M.
Siguió con la onda de siempre. Juraría que se acercó un poco como para saludarme con beso pero como yo ni bola, retrocedió (jaja). Me preguntó qué me había pasado, etc etc.
Todo bien simpático.
También me habló DURANTE la clase… y esas cosas. Al final, me esperó para irnos. Se hacía el distraído, pero me esperaba. También, los primeros metros, los hizo en silencio, como si yo no estuviera ahí. Después “se acordó” y me siguió hablando.
No me saludó con beso, se fue medio rápido.
Sí, quizás eso fue lo raro. Aunque no tiene nada de malo. Seguramente se dio cuenta de lo idiota que soy, de lo gorda que estoy, o de lo poco interesante que puedo llegar a ser.
Lo importante es que, le tiré la onda de que voy a ir a la mañana. Él me confesó que dejó de ir porque no se podía levantar (me lo dice a mí, que me acuesto a las 12 o 12.30 y me levanto a las 6.15 para estudiar japonés). El caso es que dijo cosas como “voy a tener que venir”, etc.
Si mañana viene, ENTONCES VOY A SABER QUE LE GUSTO.
Así de claro, no hay más historia.
¿Por mi parte? Sí, confieso que me gusta un poco. Pero creo que tampoco para tanto. Es que me emocioné de más, diría yo. Y tampoco sé si quiero ahora mismo intentar hacer una especie de “amistad” con alguien.
Bueno, eso es todo por hoy. Mañana, más y mejor (eso espero). Gracias por aguantarme.
PD: qué inteligente es, el muy h.p.

domingo, 4 de julio de 2010

DIARIO DE UNA OTITIS ANUNCIADA


Sí. Ha vuelto. Esta vez debutando en mi oído izquierdo. LPMQLRP. No me lo puedo creer…
Ayer me había empezado a doler el oído, y pensé “no puede ser, deben ser imaginaciones mías”. Pero hoy me desperté a las 6 y pico de la mañana, por el dolor. Genial. Justo cuando mi vida comenzaba a ponerse mínimamente interesante.
¿Iré mañana a la autoescuela? Es la pregunta que acecha sobre mi mente. Lo dudo. Si el dolor empeora, voy a tener que quedarme en casa, por si me dan mareos. No puede ser, no puede ser…
Son tan desdichada…
También tuve una fuerte discusión con mi papá. Resulta que ahora la culpa es mía de que me salga la otitis. Ahhhh, mirá vos. No sabía yo eso. Si lo hubiera sabido antes, a lo mejor hubiera podido evitar las 2 anteriores, también, ¿no?
¡¡¡Esto es increíble!!! (como didría Tsukushi Makino). Y yo todavía sigo pensando en ese chico con tan (¿buena?) onda…
Bueno, esto es todo por hoy, o al menos por ahora. Gracias por leerme y hasta la próxima.